No tenga miedo a ser original. Una buena reforma es aquella que aporta calidad, pero también un toque de distinción a nuestras vidas. Si lo hacemos todo plano y convencional, probablemente no podemos esperar del futuro más que planicie y convencionalidad. Si somos originales, el abanico de posibilidades que se nos abrirá, en todos los sentidos, será muchísimo mayor.